Es un modelo de producción y consumo que implica compartir, alquilar, reutilizar, reparar, renovar y reciclar materiales y productos existentes todas las veces que sea posible para crear un valor añadido. De esta forma, el ciclo de vida de los productos se extiende.
Implica reducir los residuos al mínimo. Cuando un producto llega al final de su vida, sus materiales se mantienen dentro de la economía siempre que sea posible gracias al reciclaje. Estos pueden ser productivamente utilizados una y otra vez, creando así un valor adicional.
Fuente: europa.eu
La Unión Europea produce más de 2.200 millones de toneladas de residuos al año.
Los RAEE representan uno de los flujos de residuos de la UE de crecimiento más rápido, y se reciclan menos del 40%.
"En 2017, el mundo generó 44,7 millones de toneladas de residuos de aparatos eléctricos y electrónicos, y solo el 20 % se recicló adecuadamente"
Eurodiputado holandés Jan Huitema
Reduces la huella de Co2 y el consumo de productos naturales involucrados en la fabricación de nuevas máquinas.
Reutilizas : das valor a un producto de calidad.
Reduces el volumen de los vertederos electrónicos.
Contribuyes a la generación de actividad en la industria del reciclaje local.